Comprende técnicas y tácticas inspiradas en el Japón medieval: la época más belicosa de este país.

La característica fundamental del Aikidō es  la neutralización del contrario mediante técnicas circulares  de proyección y de inmovilización.

 Es usado por cuerpos de seguridad  de varios países, y en Japón,  es una disciplina obligatoria para las mujeres policía.

 

En Suiguetsukan Dojo aprendemos a dar una respuesta proporcional a la agresión recibida, a luchar contra nuestro propio ego y a aprender a escuchar tanto nuestro cuerpo como el del compañero.

 

 En definitiva, un completo método de educación física, técnica y moral para  sus practicantes.

Por estas razones, constituye una perfecta herramienta para aprender por medio de  la experimentación ensayo y error.